Washington, 26 de junio de 2025 – Tras meses de promesas de deportar a inmigrantes indocumentados condenados por crímenes violentos, el Gobierno de Donald Trump ha arrestado solo a una fracción de los objetivos señalados, según datos internos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) obtenidos por Doctor J Noticias. Entre el 1 de octubre y el 31 de mayo, ICE detuvo a 185,042 personas, de las cuales 65,041 tenían condenas, aunque los delitos más comunes están relacionados con inmigración y tráfico.
Los datos revelan que, de las 13,099 personas conocidas por condenas por homicidio y las 15,811 por agresión sexual identificadas por ICE el otoño pasado, solo se arrestó a 752 y 1,693, respectivamente. Esto representa un máximo del 6% y 11% de esos grupos, dejando a la mayoría sin custodia. Casi la mitad de los detenidos actualmente no tienen cargos ni condenas.
El presidente Trump, quien utilizó estas cifras durante su campaña para criticar a Kamala Harris, ha calificado a estos inmigrantes de “criminales duros y malos” que “vagan libres”. Sin embargo, la portavoz del DHS, Tricia McLaughlin, defendió las acciones de la agencia, afirmando que en los primeros 100 días del mandato, el 75% de las detenciones fueron de indocumentados con antecedentes criminales, aunque no proporcionó detalles específicos.
El representante Tony Gonzales (R-Texas) exigió a ICE un desglose de detenciones de criminales violentos, argumentando que priorizar a “lo peor de lo peor” —como asesinos y violadores— es más efectivo que redadas masivas. Un funcionario del DHS, bajo anonimato, señaló que detener a delincuentes es más complejo y que la agencia ha desviado su enfoque hacia la deportación de cualquier indocumentado, una política que genera preocupación entre algunos republicanos, incluyendo a Gonzales, quien cuestiona su impacto en la seguridad comunitaria.
Imágen cortesía: Luis Law