La visita de Cristiano Ronaldo a la Casa Blanca junto al presidente Donald Trump se convirtió en una escena viral tras la difusión de un video oficial donde ambos aparecen caminando en cámara lenta bajo el rótulo “Two GOATS”, un guiño que incendió las redes. El contraste visual entre el futbolista —vestido completamente de negro— y el mandatario —con traje azul y corbata roja— terminó de sellar una imagen que dio la vuelta al mundo.
El encuentro ocurrió la mañana posterior a una cena diplomática ofrecida por Trump en honor al príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman, donde Ronaldo fue uno de los invitados de honor y ocupó asiento principal en el Salón Este. La velada reunió a figuras de talla global como Elon Musk y el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, quienes departieron con el astro portugués. Acompañado por Georgina Rodríguez, el delantero del Al Nassr protagonizó selfies virales y momentos que dominaron los reflectores.
Trump aprovechó la visita para compartir una anécdota personal: “Mi hijo es un gran fan de Ronaldo. Barron pudo conocerle y creo que ahora respeta un poco más a su padre, solo porque yo se lo presenté”, dijo entre risas, destacando el impacto del encuentro en su familia.
La aparición de Cristiano en Washington tiene un peso especial: marca su retorno a Estados Unidos tras casi una década. Su última visita databa de 2014, antes de que un prolongado proceso judicial relacionado con una acusación ocurrida en Las Vegas en 2009 complicara su entrada al país. Tras años de litigio, el caso fue definitivamente desestimado en 2023, despejando su situación legal y permitiendo su regreso.
La visita llega en un momento clave para la carrera del portugués, con Portugal ya clasificado al Mundial 2026. De concretarse su participación, Cristiano disputaría su sexta Copa del Mundo, un cierre histórico para una trayectoria que el propio jugador perfila como su última antes de retirarse para dedicarse a su familia.
