El gobierno de Estados Unidos anunció que podrá cancelar visas a discreción, sin necesidad de condena penal, cuando existan indicios de actividades delictivas, vínculos con grupos terroristas o riesgo para la seguridad nacional.
David Arizmendi, vocero de la embajada estadounidense en México, informó en un video difundido este lunes que la medida aplicará a cualquier persona —incluidos funcionarios públicos—, sin importar su lugar de residencia o ideología política.
“La visa es un privilegio, no un derecho. Cada país decide quién puede ingresar a su territorio”, subrayó el funcionario, al explicar que la suspensión del documento puede realizarse en cualquier momento y que, por razones de privacidad, las cancelaciones no se harán públicas.
Entre los motivos para retirar una visa destacan: permanecer más tiempo del permitido, participar en delitos, representar una amenaza para la seguridad pública o tener vínculos con el terrorismo.
El anuncio se da luego de que trascendiera que el Departamento de Estado canceló recientemente las visas de varios funcionarios mexicanos, entre ellos la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila, y otras figuras públicas.
Arizmendi enfatizó que no se requiere una condena penal para proceder: “Basta con que exista información suficiente para considerar que mantener la visa no conviene a los intereses de Estados Unidos”.
