San Rafael, California – 21 de noviembre de 2025
El mercado laboral estadounidense mostró señales mixtas en septiembre, con la creación de 119.000 puestos de trabajo que superaron las expectativas, aunque el desempleo escaló al nivel más alto en casi cuatro años, según datos divulgados este jueves por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS).
Los analistas habían pronosticado solo 50.000 nuevos empleos y una tasa de desempleo estable en 4,3%, de acuerdo con estimaciones de FactSet. Sin embargo, el informe reveló un panorama más complejo: las cifras de agosto, inicialmente reportadas como un modesto aumento de 22.000 empleos, fueron corregidas a una pérdida neta de 4.000 puestos, mientras que julio se ajustó a la baja en 7.000.
El sector de salud y asistencia social lideró el crecimiento, agregando 57.100 posiciones, lo que representó casi la mitad del total mensual. Por su parte, el rubro de ocio y hospitalidad contribuyó con 47.000 empleos, impulsado en gran medida por un clima inusualmente cálido que favoreció la actividad estival.
En contraste, se registraron pérdidas en áreas clave como transporte y almacenamiento (-25.300 puestos), servicios temporales (-15.900) y manufactura (-6.000). Estos retrocesos subrayan la desaceleración general de la economía, agravada por aranceles, inflación persistente y tasas de interés elevadas.
Verano marcado por pérdidas y un panorama incierto
El informe de septiembre, retrasado siete semanas por el cierre del Gobierno federal, podría ser el último “limpio” disponible en los próximos meses. La BLS anunció que no publicará un reporte separado para octubre; en su lugar, datos parciales de ese período se integrarán al informe de noviembre, previsto para el 16 de diciembre.
A pesar del repunte mensual, 2025 se perfila como el año de menor crecimiento en el empleo desde la pandemia de COVID-19 y, previamente, desde la Gran Recesión de 2008-2009. “El mercado laboral fue realmente débil durante el verano y no mejoró sustancialmente en septiembre”, comentó Heather Long, economista jefe de Navy Credit Union. “Tanto junio como agosto registraron crecimiento negativo; los 119.000 de septiembre son positivos, pero el promedio de los últimos cuatro meses ronda los 40.000, lo que se ve muy frágil”.
La tasa de desempleo subió en septiembre al 4,4%, el nivel más alto desde octubre de 2021, un indicador clave que genera alertas sobre posibles recesiones. No obstante, el incremento se debió principalmente a un mayor ingreso a la fuerza laboral —con más personas buscando empleo— y no a un aumento drástico en despidos, según los datos de la BLS.
Oportunidades escasas en un mercado de “baja contratación”
El crecimiento del empleo se concentró en solo dos sectores —salud y ocio/hospitalidad—, que acapararon el 87% de las adiciones en septiembre. En un contexto de contrataciones mínimas y despidos reducidos, las oportunidades para los desempleados son limitadas: en promedio, hallar un puesto toma unos seis meses, de acuerdo con las cifras más recientes de la BLS.
Un reporte separado del Departamento de Trabajo confirmó la tendencia: 1,974 millones de personas presentaron solicitudes continuas de subsidio por desempleo en la semana finalizada el 8 de noviembre, marcando un nuevo máximo en cuatro años. Las solicitudes iniciales, por el contrario, descendieron a 220.000 la semana pasada, manteniéndose por debajo de umbrales alarmantes (entre 300.000 y 400.000 de manera sostenida).
“Lo caracterizaría como un mercado de ‘no contratar, no despedir’”, explicó Long. “Pero me inquieta que, con varias industrias iniciando recortes, esto evolucione hacia ‘no contratar, empezar a despedir’”.
Implicaciones para la política monetaria
Estos datos mixtos podrían moderar las expectativas de recortes adicionales en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal en su reunión de diciembre. “El fuerte repunte en septiembre —después de la revisión a una caída en agosto— alivia temores de un colapso inminente en el empleo y reduce la urgencia de más ajustes”, escribió Kathy Bostjancic, economista jefe de Nationwide, en un análisis.
Aun así, el informe de septiembre será la visión mensual más actualizada disponible para la decisión de la Fed el 10 de diciembre, ya que los datos de octubre y noviembre completos no se conocerán hasta después.
Con la economía navegando vientos en contra, el mercado laboral estadounidense enfrenta un invierno de incertidumbre, donde los avances sectoriales contrastan con señales de fragilidad estructural.
Imágen cortesía: CNN
