En un esfuerzo por gestionar la migración irregular, el gobierno de Estados Unidos ha implementado un programa de autodeportación voluntaria que ofrece asistencia financiera a inmigrantes indocumentados que decidan regresar a sus países de origen. A través de la aplicación CBP Home, los participantes pueden solicitar su retorno, recibiendo un estipendio de $1,000 dólares y cobertura de los gastos de viaje una vez confirmado su regreso.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informó que esta iniciativa busca proporcionar una salida digna y segura para quienes se encuentran en situación migratoria irregular, al tiempo que reduce los costos asociados con las deportaciones forzadas, estimados en más de $17,000 dólares por persona.
Uno de los primeros beneficiarios del programa, un ciudadano hondureño, expresó que la decisión de regresar fue motivada por las dificultades crecientes para vivir sin documentación en Estados Unidos. “Me regresé porque las cosas están feas allá”, comentó tras aterrizar en San Pedro Sula en un vuelo fletado por el gobierno estadounidense.
Además del incentivo económico, el gobierno hondureño ha ofrecido apoyo adicional a los retornados, incluyendo asistencia financiera y créditos para la adquisición de bienes básicos.
Aunque la administración estadounidense considera que este programa podría facilitar futuras solicitudes de ingreso legal al país, organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes han expresado preocupaciones sobre la efectividad y equidad del mismo. Se espera que el DHS continúe monitoreando y ajustando la iniciativa conforme evolucione su implementación.
Imágen cortesía: El Diario Juárez
