Por lo menos así lo anunció el líder de la mayoría en la Cámara Alta quien agregó que el pacto era tentativo.
Ocurre al mismo tiempo que Florida envía guardias nacionales a la frontera y 14 gobernadores republicanos anuncian declaración en la frontera.
Los negociadores del Senado están luchando desde hace meses por llegar a un acuerdo bipartidista que combinaría cambios para solicitantes de asilo en la frontera y ayuda económica a Ucrania, cuya “supervivencia” está en juego bajo el asedio ruso. Pero los republicanos de la Cámara Baja, bajo la influencia de Trump, ya anticipan que truncarían el acuerdo.
El líder de la mayoría demócrata del Senado, Chuck Schumer, anunció el jueves ‘un voto de prueba’ la próxima semana sobre el proyecto de ley de seguridad nacional, que incluye un acuerdo bipartidista sobre restricciones de política migratoria y el paquete de ayuda a Ucrania e Israel.
Sin embargo, tras meses de negociaciones, la falta de apoyo entre los republicanos augura más bien que el acuerdo está cerca de naufragar. El factor clave en el estancamiento de las negociaciones, muchos análisis señalan, es la reciente irrupción de la campaña de Donald Trump alentando la fuerte resistencia de los republicanos de la Cámara de Representantes.
Eso, a pesar de que como venían exigiendo los republicanos desde hace mucho tiempo, el gobierno del presidente Joe Biden ha aceptado supeditar la ayuda a Ucrania a un notable endurecimiento de la política migratoria y la seguridad en la frontera, según reportan quienes conocen el acuerdo.
“La frontera sur está urgentemente necesitada, urgentemente necesitada de un arreglo”, dijo Schumer. “La supervivencia de Ucrania está en juego… La única manera de estar a la altura de las circunstancias es si ambas partes se toman en serio llegar a un compromiso bipartidista… No hemos concluido las negociaciones, así que seguiremos trabajando para lograrlo”.
El líder republicano del Senado, Mitch McConnell, se pronunció en la misma línea que Schumer: “Es hora de que hagamos algo, con suerte incluyendo un acuerdo fronterizo, pero necesitamos llevar ayuda a Israel y Ucrania rápidamente”.
Si bien hay amplio apoyo bipartidista al respaldo a Ucrania, en la Cámara Baja hay una feroz resistencia a tratar esa ayuda de modo independiente sin antes aprobar restricciones en política migratoria.
Al punto que la representante republicana por Georgia, Marjorie Taylor Greene, ha amenazado con presentar una moción de vacancia contra Johnson si permite una votación sobre la financiación de Ucrania.