Estados Unidos, 8 de mayo de 2025 – En un hecho sin precedentes, inmigrantes que han ganado casos de asilo o tienen procesos activos en tribunales de inmigración están recibiendo correos electrónicos del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) instándolos a autodeportarse de Estados Unidos. Estos mensajes, que también llegan a abogados estadounidenses, incluso ciudadanos naturalizados, han generado confusión y preocupación en comunidades migrantes.
Los correos, enviados en el marco de la política de “tolerancia cero” de la administración Trump, incluyen una advertencia para que los inmigrantes abandonen el país voluntariamente bajo amenaza de arresto, multas de hasta $998 diarios y posible encarcelamiento. En algunos casos, los mensajes llegan adjuntos a notificaciones judiciales que confirman la aprobación de asilo, lo que ha sido calificado como “contradictorio” por expertos.
En Salt Lake City, Utah, el abogado venezolano Carlos Trujillo, ciudadano estadounidense por naturalización, recibió un correo ordenándole abandonar el país, según reportó CBS. En Nueva York, el abogado Paul O’Dwyer encontró un aviso de autodeportación adjunto a la notificación de asilo otorgado a uno de sus clientes el 28 de abril. En Dallas, Texas, el abogado Haim Vásquez reportó casos similares, incluyendo a un inmigrante con asilo ganado y otro con un caso pendiente, ambos ingresados legalmente vía la aplicación CBP One.
En Miami, Florida, el abogado Ángel Álvarez recibió el 5 de mayo una decisión judicial otorgando asilo a un cliente, acompañada de un mensaje del DHS instándolo a autodeportarse. “Es una broma”, expresó Álvarez, destacando la incongruencia de la notificación.
El mensaje del DHS, en inglés y español, promueve la autodeportación como una opción “más segura” que permite a los inmigrantes “elegir su vuelo” y conservar sus ingresos. Ofrece la posibilidad de vuelos pagados por el gobierno a través de la aplicación CBP Home para quienes no puedan costearlos, junto con “oportunidades de inmigración legal en el futuro”. Sin embargo, advierte sobre “consecuencias” como multas de $1,000 a $5,000, prisión y una prohibición de reingreso legal si no se cumple.
Expertos como Alex Gálvez, abogado en Los Ángeles, señalan que, aunque no es nuevo que los abogados reciban correspondencia en nombre de sus clientes para protegerlos, el envío de mensajes de autodeportación a personas con casos resueltos o pendientes es una práctica novedosa y preocupante. “En casos pendientes, no deberían enviar estas notificaciones porque están amparados hasta que finalice el proceso”, afirmó Vásquez.
Los mensajes omiten mencionar la Ley de 1996, que impone castigos de 3 a 10 años fuera de EE.UU. para indocumentados que acumulen tiempo ilegal, lo que agrava la confusión. Las notificaciones han desatado críticas por su aparente contradicción con el debido proceso y por dirigirse incluso a personas con estatus legal protegido.
Imágen cortesía: France 24