Caracas, 25 de agosto de 2025 – Cientos de venezolanos acudieron este sábado a la Plaza Bolívar, en el centro de Caracas, para inscribirse como voluntarios en la Milicia Bolivariana, respondiendo al llamado del presidente Nicolás Maduro para fortalecer la defensa nacional ante lo que calificó como amenazas de Estados Unidos.
La Milicia Bolivariana, creada por el fallecido presidente Hugo Chávez como una rama de las Fuerzas Armadas de Venezuela, vio largas filas de personas entregando sus datos para unirse a sus filas. Entre los inscritos, Doris Peña, trabajadora comunitaria, expresó su compromiso: “Debemos continuar con el legado de Hugo Chávez: luchar por la patria y los derechos de todos los venezolanos”. Por su parte, Robert Nieves, un profesor sin experiencia en el uso de armas, afirmó que “defender el país no es solo tener un arma”.
El llamado de Maduro se produce tras la decisión de Estados Unidos de duplicar la recompensa por información que lleve a su arresto y de aumentar la presencia de tropas en aguas de América Latina y el Caribe. La administración del presidente Donald Trump ha justificado estas medidas como parte de esfuerzos para combatir el narcotráfico en la región. Sin embargo, Maduro ha denunciado estas acciones como “amenazas extravagantes, extrañas y descabelladas”.
Algunos de los nuevos milicianos compartieron la percepción de una amenaza externa. Rogelia Martínez, trabajadora social, aseguró: “Defendemos a nuestro pueblo y, de una u otra forma, nos vamos a defender”. El ministro de Defensa, Vladimir Padrino, reforzó este mensaje en redes sociales, publicando un video del proceso de inscripción y destacando que el pueblo venezolano no solo se suma a la Milicia Bolivariana, sino que también expresa su rechazo a lo que calificó como “agresiones imperialistas”.
Maduro ordenó el despliegue de 4,5 millones de milicianos en todo el país, en un contexto de crecientes tensiones con Washington. La movilización refleja el esfuerzo del gobierno por consolidar su base de apoyo y proyectar una imagen de unidad frente a las sanciones y presiones internacionales.
Imágen cortesía: El Imparcial