La tranquilidad de Playa Bagdad podría verse amenazada tras el hallazgo de residuos presuntamente provenientes del cohete Starship, lanzado por la empresa aeroespacial SpaceX. Ante esta situación, el alcalde de Matamoros, Alberto Granados, no descartó la posibilidad de emprender acciones legales si se confirma la existencia de un riesgo ecológico para la región.
“Lo que estamos solicitando es evidencia clara de que estos materiales no representan un peligro. Queremos la información necesaria para tener tranquilidad, tanto el gobierno como los ciudadanos”, declaró el edil, subrayando que la prioridad es garantizar la seguridad ambiental de los matamorenses.
Granados informó que ya existe una línea de comunicación abierta con SpaceX, cuyos representantes han manifestado su disposición a colaborar en las labores de limpieza del área afectada. Mientras tanto, los residuos hallados en la playa se encuentran bajo resguardo del municipio, en espera de que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) realice las inspecciones correspondientes.
Pese a la situación, la playa permanece abierta al público. No obstante, las autoridades locales reiteraron su firme intención de que la empresa asuma su responsabilidad si se determina un impacto ambiental negativo derivado de los lanzamientos espaciales.
La comunidad científica y ambientalista ya ha mostrado interés en conocer el alcance de los materiales encontrados, en medio de crecientes preocupaciones por la posible afectación a los ecosistemas costeros del Golfo de México.
