Washington, 7 de mayo de 2025 – Durante la primera visita oficial del recién electo primer ministro de Canadá, Mark Carney, a la Casa Blanca, un intercambio con el presidente Donald Trump generó titulares. En la Oficina Oval, Trump reiteró su controvertida propuesta de que Canadá se convierta en el estado 51 de Estados Unidos, a lo que Carney respondió con firmeza: “Canadá nunca estará a la venta”. Trump, en tono provocador, replicó: “Nunca digas nunca”.
El comentario, que tuvo lugar durante una reunión bilateral, refleja las tensiones en la relación entre ambos líderes, mientras Trump impulsa una agenda de mayor integración económica y política con el vecino del norte. Carney, por su parte, defendió la soberanía canadiense, subrayando la identidad independiente de su nación.
Este episodio se suma a una serie de declaraciones audaces de Trump, quien recientemente ha abordado temas como deportaciones masivas, nuevos aranceles y la reapertura de la prisión de Alcatraz. La sugerencia sobre Canadá, aunque vista por algunos como retórica, ha avivado el debate sobre las intenciones de la administración Trump en la región.
La reunión, destinada a discutir comercio y seguridad, dejó en claro las diferencias de visión entre ambos líderes, mientras el mundo observa cómo evolucionará esta dinámica en los próximos meses.
Imágen cortesía: BBC