Una tormenta invernal inusual traerá temperaturas extremadamente frías y nevadas significativas a gran parte de Estados Unidos esta semana. Según pronósticos meteorológicos, más del 75% del territorio enfrentará temperaturas gélidas debido a una combinación de aire del Ártico que desciende desde Canadá y un sistema de baja presión que avanza por la costa noreste.
El impacto ya se siente en el noreste, donde más de 70 millones de personas están bajo alertas de clima invernal y advertencias de tormenta desde Tennessee hasta Maine. El domingo, el corredor de la I-95, que conecta importantes ciudades como Washington, Nueva York y Boston, comenzó a registrar intensas nevadas que se extenderán hasta las primeras horas del lunes.
En ciudades como Nueva York y Boston, se espera que la acumulación de nieve alcance hasta 15 centímetros, mientras que en Portland, Maine, las nevadas podrían llegar a los 20 centímetros. Hartford, Connecticut, también verá importantes acumulaciones, con pronósticos de entre 13 y 18 centímetros de nieve.
La tormenta no solo afecta la movilidad terrestre, sino también la aérea. Hasta el domingo por la noche, se habían cancelado al menos 964 vuelos en todo el país, y otros 1.700 sufrieron retrasos, según el sitio de seguimiento de vuelos FlightAware. En los aeropuertos de Newark y LaGuardia, en Nueva York, más del 20% de los vuelos fueron cancelados, afectando a miles de viajeros.
Ante la situación, el gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, declaró el estado de emergencia para su estado, instando a los ciudadanos a evitar viajes innecesarios y mantenerse informados sobre las condiciones climáticas.
La combinación de frío extremo y nieve paralizante supone un desafío importante para millones de estadounidenses en las próximas jornadas, con las autoridades llamando a la precaución y la preparación.
Imágen cortesía: El País