Washington, 16 de octubre de 2025 – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció en una conferencia de prensa en la Casa Blanca que ha otorgado autorización a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) para realizar operaciones en Venezuela, con el objetivo de frenar el tráfico de drogas y los flujos de inmigración indocumentada provenientes de ese país. Sin embargo, el mandatario no aclaró si estas acciones incluyen medidas directas contra el presidente venezolano, Nicolás Maduro.
Durante su intervención, Trump vinculó esta decisión a su estrategia para combatir el narcotráfico en la región, destacando que “muchas drogas llegan desde Venezuela, por mar y por tierra”. Añadió que su administración no permitirá que el país sea “arruinado” por la llegada de inmigrantes, reiterando su controvertida afirmación de que otros países envían a sus peores ciudadanos a Estados Unidos.
La autorización a la CIA se dio en paralelo con una directiva secreta firmada este verano, que ordena a las fuerzas armadas atacar a cárteles de drogas en América Latina. Esta medida se enmarca en una serie de acciones que incluyen un reciente ataque militar estadounidense contra un barco sospechoso de narcotráfico frente a las costas de Venezuela, en el que fallecieron seis personas. Según el gobierno de EE.UU., este es al menos el quinto ataque de este tipo, lo que ha generado tensiones con Maduro, quien evalúa declarar un estado de emergencia en su país.
Interrogado sobre por qué no se recurrió únicamente a la Guardia Costera para interceptar los envíos de drogas, Trump calificó los esfuerzos previos como “totalmente ineficaces” y defendió un enfoque más contundente. Sin embargo, las medidas han generado críticas entre algunos legisladores. El senador demócrata Peter Welch, de Vermont, cuestionó la legalidad de las acciones, señalando una falta de supervisión del Congreso: “No hay respuestas sobre la base legal de estas operaciones. Esto no es aceptable”. Por su parte, el senador republicano Rand Paul también expresó preocupación, mientras que otros republicanos, como el senador Jim Risch, respaldaron al presidente, afirmando que está “haciendo lo que debe”.
Fuentes del Pentágono revelaron que al menos uno de los ataques recientes en el Caribe tuvo como objetivo a ciudadanos colombianos, lo que indica que la campaña militar de EE.UU. es más amplia de lo inicialmente reportado. Estas acciones han intensificado las preocupaciones sobre el alcance y las implicaciones de las operaciones estadounidenses en la región.
Imágen cortesía: El País
