Nueva York, 26 de agosto de 2025 – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este lunes a través de su plataforma Truth Social la destitución de Lisa Cook, gobernadora de la Reserva Federal, en un acto que marca una escalada histórica en los ataques de un mandatario contra la independencia del banco central estadounidense. Esta acción, cuya legalidad es cuestionable, podría desencadenar una disputa judicial que llegue hasta la Corte Suprema.
La decisión de Trump se basa en acusaciones de supuesto fraude hipotecario contra Cook, quien ha sido miembro de la junta de gobernadores de la Reserva Federal desde 2022. Las acusaciones provienen de Bill Pulte, director de la Agencia Federal de Financiamiento de Vivienda y aliado de Trump, quien el 20 de agosto sugirió al Departamento de Justicia investigar a Cook por declarar dos domicilios como su residencia principal en documentos hipotecarios. Cook, por su parte, afirmó haber rectificado de inmediato cualquier error y rechazó las acusaciones, declarando que no abandonaría su cargo por “acoso” basado en un tuit.
La Ley de la Reserva Federal de 1913 limita el poder presidencial para destituir a un gobernador de la Fed, permitiéndolo solo “por causa”, lo que históricamente se ha interpretado como una razón grave que impida al funcionario desempeñar su rol. Esta restricción coloca en terreno incierto la legalidad del despido de Cook, y expertos anticipan que el caso podría derivar en un litigio prolongado, potencialmente resuelto por la Corte Suprema.
Si Trump logra consolidar la destitución de Cook, tendría la oportunidad de nombrar a su reemplazo, consolidando su influencia sobre la junta de gobernadores, que consta de siete miembros y cuyos cargos tienen una duración de 14 años. Actualmente, dos de los gobernadores, Christopher Waller y Michelle Bowman, fueron designados por Trump, y el presidente espera la confirmación de Stephen Miran, nominado para reemplazar a Adriana Kugler, quien dejó el cargo este año. De concretarse, Trump podría controlar cuatro de los siete puestos, generando preocupaciones sobre una posible interferencia política en la Fed, una institución que históricamente ha operado de manera independiente para decisiones clave como el establecimiento de tasas de interés.
Trump ha criticado repetidamente a la Reserva Federal, liderada por Jerome Powell, por no reducir las tasas de interés, argumentando que estas políticas afectan la economía, especialmente en el contexto de los aranceles que su administración ha implementado. La destitución de Cook intensifica las tensiones entre la Casa Blanca y la Fed, colocando en el centro del debate la autonomía de una de las instituciones financieras más importantes del mundo.
Imágen cortesía: CNN
