Autoridades federales revelaron este martes el hallazgo de una presa y cinco represas construidas de forma ilegal en un rancho propiedad del exgobernador de Chihuahua, César Duarte Jáquez, acusado de aprovechar su cargo para apropiarse de recursos hídricos en una de las regiones más afectadas por la sequía en el país.
El titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Efraín Morales López, expuso durante la conferencia matutina en Palacio Nacional que el exmandatario estatal acumuló más de 700 mil metros cúbicos de agua para uso personal mediante estas construcciones clandestinas.
“Lo que se observa en la imagen es una propiedad del exgobernador César Duarte, donde construyó presas y represas para acaparar agua de forma ilegal durante su gestión”, denunció Morales. Afirmó que este tipo de prácticas eran comunes “bajo el amparo del poder político y económico” durante el periodo neoliberal.
El rancho, de cientos de hectáreas, operaba mientras muchos agricultores de la región enfrentaban severas restricciones para acceder al vital líquido. “Es paradójico y lamentable que, en un estado como Chihuahua, afectado por el cambio climático, haya productores que no pueden sembrar mientras un exgobernador se beneficia de esta manera”, subrayó el titular de Conagua.
Además, Morales López denunció que una jueza federal otorgó un amparo exprés a Duarte que impide la destrucción de las presas. Según el funcionario, dicho amparo fue concedido en menos de 24 horas y promovido por personas cercanas al exmandatario, incluyendo a sus hermanos.
“Nos llama la atención que esta jueza es la misma que suspendió la distribución de los libros de texto”, agregó Morales, al insinuar una red de protección judicial que favorece a figuras del viejo régimen político.
El caso ha reavivado las críticas sobre la impunidad y el uso del poder público para fines privados, además de exponer la crisis hídrica que enfrenta el norte del país. La administración federal anunció que continuará con las investigaciones y buscará revertir las medidas legales que impiden actuar contra estas construcciones ilegales.
César Duarte, detenido en 2020 en Estados Unidos y extraditado a México en 2022, enfrenta varios procesos por corrupción, peculado y enriquecimiento ilícito durante su mandato entre 2010 y 2016.
