Washington, 20 de junio de 2025 — El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha emitido nuevas directrices que exigen a los miembros del Congreso notificar con 72 horas de anticipación antes de visitar centros de detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), una medida que ha generado controversia y críticas por parte de legisladores demócratas. Esta política, calificada como “sin precedentes” por el representante Bennie Thompson, busca limitar el acceso inmediato de los congresistas a instalaciones donde se retienen migrantes, a pesar de que la ley de asignaciones anuales permite inspecciones sin notificación previa.
El memorando del DHS también distingue entre oficinas locales de ICE y centros de detención, argumentando que las primeras no están sujetas a la supervisión sin previo aviso. Thompson, principal demócrata en la Comisión de Seguridad Nacional, denunció esta medida como una “afrenta a la Constitución y la ley federal”, afirmando que las oficinas de ICE, donde se retiene a migrantes y, en ocasiones, a ciudadanos estadounidenses, deben considerarse centros de detención sujetos a inspección en cualquier momento.
Los cambios en las directrices llegan en un contexto de creciente tensión entre legisladores demócratas y las fuerzas del orden, en medio de protestas contra la ofensiva migratoria del gobierno de Donald Trump. Recientemente, el alcalde de Newark, Ras Baraka, fue arrestado por allanamiento al intentar ingresar al centro de detención Delaney Hall en Nueva Jersey junto a los representantes LaMonica McIver, Robert Menéndez Jr. y Bonnie Watson Coleman. Aunque los cargos contra Baraka fueron retirados, McIver enfrenta acusaciones federales por obstrucción a funcionarios de inmigración.
En incidentes similares, el senador Alex Padilla fue expulsado a la fuerza de una conferencia de prensa en Los Ángeles tras intentar cuestionar a la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, sobre las políticas migratorias. Asimismo, el contralor de Nueva York, Brad Lander, fue arrestado frente a un tribunal de inmigración en Manhattan al intentar evitar la detención de un migrante.
El DHS señaló que “hará todo lo posible” por cumplir con la ley, pero citó “condiciones operativas y medidas de seguridad” que podrían restringir el acceso de los legisladores. CNN ha solicitado comentarios adicionales al DHS, pero aún no ha recibido respuesta.
Estos enfrentamientos destacan la creciente polarización en torno a las políticas migratorias de la administración Trump, mientras los legisladores demócratas intensifican sus esfuerzos por supervisar las condiciones en los centros de detención de ICE.
Imágen cortesía: CNN
