El FC Barcelona volvió a lo más alto del fútbol español tras conquistar su 28º título de LaLiga, gracias a una actuación estelar del juvenil Lamine Yamal, quien fue clave en la victoria por 0-2 ante el Espanyol en el derbi catalán.
En un partido con más tensión que brillantez, el conjunto dirigido por Hansi Flick supo capitalizar los momentos justos. Tras un primer tiempo en el que los locales desperdiciaron dos oportunidades claras, fue el talento precoz de Yamal el que destrabó el encuentro en la segunda mitad. Apenas iniciada la parte complementaria, el atacante de 17 años sacó un disparo desde fuera del área que se coló en el ángulo, dejando sin opciones al arquero rival y silenciando el estadio.
La sentencia llegó en el cierre del encuentro, nuevamente con el sello de Yamal. Esta vez, como asistente: filtró un pase preciso para que Fermín López pusiera el 0-2 definitivo, resultado que le permitió al Barça asegurar matemáticamente el campeonato, con seis puntos aún por disputarse y una ventaja de siete sobre el Real Madrid.
Con este triunfo, el Barcelona suma su tercer trofeo de la temporada, tras alzarse con la Supercopa de España y la Copa del Rey. Una campaña de ensueño para Hansi Flick en su primer año al frente del banquillo culé, y una consagración para la nueva joya del club, Lamine Yamal, quien ha dejado claro que el futuro —y el presente— del Barça pasa por sus botas.