Un fuerte movimiento telúrico remeció el viernes el centro de Japón, pero las autoridades indicaron que no se reportaron daños preliminares ni había amenaza de tsunami.
El portavoz del gobierno, Hirokazu Matsuno, declaró a la prensa en Tokio que había sido informado de la muerte de una persona y de “múltiples inmuebles derrumbados”.
El terremoto de magnitud 6.2 se registró en la prefectura de Ishikawa, cerca de la costa centroccidental de la principal isla del país, Honshu, según el centro de información sobre terremotos del Servicio Geológico de Estados Unidos.
La agencia noticiosa japonesa Kyodo reportó que no habían indicios alarmantes en una central nuclear próxima, en la prefectura de Niigata.